EXPLOTACIÓN LOMA MIRANDA

La Vega.  Loma Miranda, sección montañosa de este municipio donde Falcondo Xstrata Nickel pretende explotar ferroníquel, fue escogida por la  Cooperativa Vega Real (CVR) para filmar un  documental titulado “La vida no se negocia”, en el que  se exponen los daños que causarían las operaciones mineras en la zona.

Enclavada al Sur de esta ciudad, en uno de los puntos de  la Cordillera Central, en el centro de La  Española, Loma Miranda es un corredor  hídrico en el que convergen numerosos manantiales que surten y dan inicio al río Jagüey y varios arroyos, que son a la vez afluentes  de los ríos Jima y Camú.  

Resalta la exuberante  foresta y la nutrida  biodiversidad de la zona, destacando la función del bosque existente allí en cuanto a la modificación que hace de los vientos alisios provenientes del Océano Atlántico,  permitiendo que una vasta extensión del Valle del Cibao goce de un clima benigno.

Esa bonanza, al menos en el municipio de La Vega, se ha degradado debido a las operaciones mineras que realiza Xstrata Nickel en Loma Ortega, distante unos pocos kilómetros de aquí, lo que se agravaría de manera dramática si se permite la apertura de frentes mineros en la vecina Loma Miranda, se explica en el referido documental.

La producción audiovisual es  dirigida por el presidente de la CRV,  Yanio Concepción, quien preside una comisión nombrada por el ayuntamiento local con la encomienda de investigar los daños  que acarrearía la pretendida explotación. Esa comisión también deberá establecer las bases del ordenamiento territorial de este municipio.

Riqueza productiva.  En todas esas localidades los campesinos producen frutas y víveres, para vender y alimentar las familias y como completivo del presupuesto de los hogares, afirmaron  labriegos, incluidos algunos que residían en La Manaclita,  que fueron reubicados en otro lugar por la minera.

Explicaron que producen en el monte, de forma “silvestre”, sin perjudicar la foresta, yuca, batata, guandules, frijoles, yautía, mapuey; naranja, mango, mandarina, chinola y otros rubros menores y frutas.

Perjuicio de eventual explotación.  Si el Gobierno permite que exploten los yacimientos de dicho mineral  todos los manantiales se secarían, y por tanto el río Jagüey y sus arroyos tributarios, previamente haber contaminado el Jima y el Camú, los cuales irrigan en el Valle del Cibao  miles de tareas que se cultivan de arroz y otros rubros agrícolas que precisan de agua.

Estudios realizados y dados a conocer por entidades calificadas estiman que la explotación en Loma Miranda afectaría las aguas de la presa de Rincón, que riega  miles de tareas en Jima Abajo y Jima Arriba, Rincón, Jumunucú, El Pino y Fantino. También las aguas de Camú que irrigan cultivos de arroz y otros en Ranchito, Rancho Viejo, Pontón, Cenoví y parte de San Francisco de Macorís.   

Esto sería un drama de grandes proporciones, dicen los campesinos, pues  el hambre invadiría  miles de hogares, ya que esta provincia aporta  el 26% del arroz que consume el país.

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